Seguimos con las mates...continuación

La semana pasada me quedé comentando el caso de un alumno a quien vengo acompañando con una adaptación curricular en matemáticas y comunicación desde hace algunos años.  Había planteado a grandes rasgos los pasos por los que fuimos atravesando y como daba dos pasos para adelante y uno para atrás, pero que sin embargo, su avance en comparación con él mismo ha sido muy grande y que cada vez está más cerca de los mismos contenidos que se trabajan en el aula de clase.

Terminé el artículo anterior comentando sobre una estrategia que le resultó de mucha ayuda para entender lo que era contar de dos en dos y ser capaz de completar patrones con esta secuencia, sin embargo, lograr hacerla suyo le tomó varias sesiones, de manera que tenía claro que debía lograr entender lo que era contar saltando números, no sólo de 2 en 2, sino también de 3 en 3, de 4 en 4 y sucesivamente.

Ha necesitado hacer muchísimos ejercicios de este estilo, siempre con su recta numérica al lado para lograr internalizar la idea, y con repeticiones frecuentes, con pocos ejercicios cada vez.

Luego de introducir las tablas de multiplicación, usando el método Mamut que comenté en el artículo anterior, donde se trabaja muchísimo con el concepto de agrupar en conjuntos la cantidad de veces, empezamos a desarrollar problemas muy simples de multiplicación como por ejemplo:

"Tengo 5 perros y cada uno come 2 huesos. ¿Cuántos huesos deberé comprar?" 

A la par fuimos utilizando los mismos problemas para la comprensión de la división, dejándole entender que la división es la operación opuesta a la multiplicación y que son las mismas tablas que se deben usar para efectuar las operaciones. Es importante usar material concreto  para que represente las familias de números, como 2 x 5 = 10.  Tanto para agrupar como para repartir. Que coloque 2 elementos en 5 grupos, y que luego reparta, distribuya, divida, 10 elementos entre 2 grupos para ver cuántos elementos corresponden a cada grupo.  Para esto puedes usar botones, plumones, frijoles, lo que tengas a la mano.

Luego pasamos a que aprendiera el proceso de multiplicar dos dígitos por uno, utilizando únicamente las tablas del 2 al 5, y debido a sus dificultades de memoria, ha aprendido a usar una cartilla de multiplicaciones para facilitarle el camino, puesto que aunque dedicamos tiempo a la práctica de las tablas, le tomará más tiempo que al resto saberlas todas de memoria y lo que buscamos no es que se frustre sino que avance.  En mi experiencia, usando esta cartilla, siguen avanzando con los contenidos de matemáticas, y de tanto usarlas terminan por aprenderlas, pero un par de años más tarde que el resto.  Sin embargo, lo más importante es que entiendan el concepto y que operen correctamente, ya que en lo sucesivo lo más probable es que usen una calculadora. Los que van avanzando continuarán aprendiendo el proceso de multiplicar por dos dígitos, siempre con una guía paso a paso hasta que lo haya mecanizado.

Con las divisiones se hará de la misma forma, pero una vez que haya aprendido bien a multiplicar, de lo contrario lo confundiremos.  De igual forma, les plantearemos problemas muy simples.

En el camino debimos continuar introduciendo los millares y para esto teniendo ya el dominio de las centenas fue bastante simple que lo aprendiera. 

Le preparé una cartilla con las 4 posiciones y la forré con papel contact, de manera que pudiera escribir encima con plumón de pizarra e ir colocando cada uno de los números en el lugar correcto. Debía usar fichas para descomponer cada número adjudicándole la cantidad de millares, de centenas de decenas y de unidades para luego escribirlo sobre papel.  

La lectura de números ha continuado siendo una actividad de inicio de cada sesión, porque de lo contrario olvida cómo se llaman; las decenas y unidades las tiene muy bien incorporadas, las centenas y millares aún se le confunden un poco, pero va afianzándolas en la medida que le pido que los lea en voz alta.

Las fracciones ha sido un contenido que le ha resultado bastante simple y lo ha entendido desde el comienzo,  dibujando muchos gráficos sobre la pizarra acrílica usando colores diversos. De igual forma ha sucedido con la geometría, que aunque aún  le cuesta nombrar las diferentes formas, tiene claridad sobre lo que son los perímetros y áreas. 

Una app de actividades matemáticas por niveles que uso mucho y que a los chicos les encanta usar es www.ixl.com.  Te brinda hasta 20 actividades gratis diarias, en mi caso lo tengo contratado.

Los chicos con dificultades en el aprendizaje son capaces de ir aprendiendo lo mismo que los demás pero uno a uno; tal vez, en algunos casos, en niveles un poco más simples, pero desarrollando la habilidad analítica que proporcionan las matemáticas.  Sólo necesitan de nuestra paciencia, que les desagreguemos las actividades en varios pasos simples, que les proporcionemos las ayudas paso a paso, y que cada día repasen un poquito de cada tema para no olvidarlo y así continuar avanzando a su ritmo y estilo.

Necesitan dibujar ellos, por lo que la pizarra acrílica me parece la mejor ayuda inicial antes de trasladarlos al papel y sin duda necesitan usar papel cuadriculado, de preferencia de cuadros más grandes, porque les permite aprender a ubicarse en el espacio.